jueves, 16 de enero de 2014

PROBADOR DE ROPA ONLINE


Muchas personas que compran habitualmente a través de internet dudan y se muestran remisas cuando se trata de adquirir ropa. La incertidumbre por cómo sentará una prenda, o si será de la talla adecuada, genera indecisión frenando el impulso de compra, pero esto está empezando a solventarse gracias a las posibilidades que brindan las nuevas tecnologías. En algunos grandes almacenes de Estados Unidos y de Europa es posible encontrar unos sensores (basados en la tecnología Kinect de Microsoft) que monitorizan el cuerpo de los clientes creando una imagen en 3D, facilitando de este modo la búsqueda de la ropa que mejor se adapta a sus características físicas. Además, los datos recogidos sirven para compras posteriores en las mismas tiendas, sin que sea imprescindible la presencia física, favoreciendo así la compra electrónica posterior. 

Con esta misma intención de ayudar al consumidor en la elección correcta de prendas de ropa, se ha puesto en marcha un proyecto que pretende crear un probador virtual en 3D de ropa infantil. El proyecto, de nombre KIDSIZE, potenciará el comercio (tanto electrónico como en tienda) en el sector de moda infantil, al reducir notablemente las tasas de devolución por insatisfacción en el consumidor como consecuencia de los problemas surgidos por diferencias de talla. En esta iniciativa participan 9 entidades de cinco estados de la Unión Europea referentes en el sector de la infancia y las nuevas tecnologías, y está previsto que se desarrolle a lo largo de los próximos 30 meses.

El sistema KIDSIZE permitirá fácilmente la captura en 3D de la forma del cuerpo a partir de algunas fotografías realizadas por cualquier tecnología de uso cotidiano (smartphone, webcam, tablet , teléfonos móviles o cámaras digitales). Una vez digitalizado el cuerpo del niño, la aplicación propondrá la talla óptima de acuerdo con su silueta y el patrón de crecimiento de los niños, visualizando el correcto ajuste y minimizando el riesgo de devolución, principal barrera para el mercado de ropa online. 

domingo, 5 de enero de 2014

PYMES EN LAS REDES


Las cifras que alcanza el negocio del comercio electrónico B2C en España cada vez son mayores (más de 12.000 millones de euros durante el 2012, según el estudio presentado por el Observatorio Nacional de las Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información), y el nuevo año se afronta con optimismo por las mejores expectativas económicas y de crecimiento de nuestro país. El B2C (Business-to-Consumer en inglés) constituye una estrategia desarrollada por las empresas comerciales dentro de la sociedad digital, con el objetivo de llegar directamente al usuario o consumidor final. El término se utiliza para hacer referencia a las plataformas virtuales utilizadas en el comercio electrónico para poner en contacto a las empresas/vendedoras con los particulares/compradores, y se distingue de la expresión B2B (Business-to-Business, de negocio a negocio). 

En las cifras alcanzadas el pasado año fue decisivo el aumento del número de internautas compradores, así como la influencia positiva de las redes sociales en el marco del B2B. Las pequeñas y medianas empresas han incorporado la utilización de las redes sociales como parte de su estrategia de marketing, en una tendencia que va en aumento como vía decisiva para llegar a su público objetivo y establecer una comunicación bidireccional. Linkedin, Twiter, Pinterest, y de forma destacada, Facebook, son las plataformas escogidas por los consumidores para conectar con las empresas, que, a su vez, obtienen de los medios sociales una información útil sobre la competencia y las tendencias en el sector, además de servir de cauce para conseguir nuevos clientes. El análisis del comportamiento de los usuarios de las redes sociales reafirma el papel que las mismas seguirán jugando en el futuro: un 71% adquiere productos de las marcas a las que sigue, mientras que un 15% prefiere comprar productos de aquellas empresas con las que puede fácilmente contactar a través de las redes sociales. Y antes de comprar, el 46% busca en las redes la confirmación que necesita para tomar su decisión, y un 15% demanda información sobre las empresas que tiene en su entorno. Los mayores usuarios de las redes sociales son los jóvenes nacidos entre la década de los 80 y el año 2000. Con buen nivel educativo y un carácter decidido, son grandes consumidores de bienes y servicios, y el 95% apuesta por marcas que se muestran activas en los medios sociales.